El director británico Mike Leigh,
conocido por dramas como Secretos y
mentiras (1996) o El secreto de Vera
Drake (2004), nos narra casi de forma documental la última parte de la vida
del pintor William Turner mediante las pinceladas de un huraño Timothy Spall.
QUÉ CUENTA: La vida del pintor Turner comienza a decaer desde el momento en el que su padre, con quien mantenía un vínculo especial, fallece. El artista se refugia excéntricamente en sus cuadros y en Mrs. Booth, propietaria de una pensión, pero nada puede salvarlo de la crítica del resto de artistas y académicos.
Leigh cuenta con dos potenciales a tener en
cuenta. La primera, y más resaltable, es la interpretación de Timothy Spall. El
que hiciese de "Colagusano" en la saga Harry Potter reivindica con éxito su
capacidad interpretativa llevándose uno de los mejores protagonistas que
posiblemente haga nunca. William Turner le va como anillo al dedo con su tosca
sensibilidad, sus gruñidos constantes y su movimiento de pincel. ¿Era el
artista de verdad así? No lo sabemos, pero a partir de ahora, la imagen de
Turner tiene el rostro y el acento cerrado de Spall.
Lo segundo a tener en cuenta de Mr. Turner es esa fotografía única, que
busca en todo momento los planos adecuados para hacer un símil con las mezclas
coloristas del pintor. Tanto los paisajes ingleses como la ambientación creada
para la ficción ayudan a una magnífica fotografía a retratar la vida del
artista. La acercan al espectador para darle el placer de presenciar las
pequeñas historias que se esconden detrás de sus cuadros más representativos.
El resto es puramente pasajero. Es
complicado encontrar una historia en la película más allá del seguimiento de
los días seleccionados de Turner. El objetivo del director no pasa del modo
contemplativo, como si se hubiese quedado estancado mirando un solo cuadro en
un museo. Durante más de dos horas. Una duración exagerada para una película
que narra bocetos básicos de una vida marcada tan pronto por el éxito como por
las críticas más dañinas. El mito y el hombre unificados por una figura tosca y
mundana.
Te gustará si…
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La ves una tarde de domingo, después de comer.
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No buscas una montaña rusa de emociones. Apenas despega
del suelo
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Te gustan las películas históricamente bien
ambientadas.
Imágenes de Mr. Turner
